Podrás pensar que recomendarte ahora un cortadillo, cuando la caló está llegando con fuerza es de majaras, pero cuando pruebes esta versión del cortadillo comprenderás que se pueden comer hasta con 40 grados a la sombra. Son pequeñitos, se comen en tres bocaos y son escandalosamente ligeros y suaves, tan sólo con una finísima capa de cidra en medio. Están hechos con manteca, como es habitual en este dulce, pero en la pastelería consiguen que el pastel quede ligero y suava y nada apelmazado..una obra maestra del cortadillo (sin Rinconete). Los elabora el maestro pastelero José Francisco Gálvez, que lo aprendió a hacer de su padre José que fundó la pastelería en 1973. La unidad sale a 50 céntimos (precio a junio 2019)

Victoria Martínez, esposa de José Francisco y que se encarga de atender al público en la Confitería Galvez con sus famosos cortadillos. Foto: Cosasdecome