La creme brulee es un postre típico francés que puede recordar a las natillas y que se parece bastante en composión a la crema catalana. El cocinero Carlos Ramos, que ha pasado por varios restaurantes de interés tapatológico en su dilatada biografía, realiza versión de este postre en el que aporta varios guiños de originalidad. El conjunto, que es lo primero a lo que hay que referirse, resulta jugoso y ligero. Además cuando te lo vas tomando vas descubriendo nuevos detalles que se esconden dentro del vaso en el que llega el postre. La crema es ligera y está muy bien trabada. Está aromatizada con vainilla que se le pone a la leche mientras cuece a fuego muy lento. Para la confección de la crema Carlos utiliza huevos de gallinas de corral, que dan más cuerpo al conjunto y también le pone un puntito de ron. En el interior del vaso hay también un helado de guindas y tropezones de frutos rojos. Por encima un poco azúcar caramelizada mediante una técnica especial del cocinero que utiliza una cuchara para darle el punto al azúcar. Como curiosidad se sirve la crema en «medio postre» una modalidad puesta en marcha por este establecimiento para permitir que este final de la comida se pueda hacer de forma individual y en pequeñas porciones. La crema sale a 3,70 euros (precio a junio de 2023).

Carlos Ramos, autor de este postre, y Rafa González en su establecimiento. Foto: Cosasdecome