Los chicharrones de la bodeguita Romero y Mejías
Tapa
Los chicharrones de la bodeguita Romero y Mejías
Tapatólogo descubridor:
Descripción

Muy pocos chicharrones tienen la virtud de estar buenos cuando han abandonado la condición de «templaítos». Esto tan sólo lo consiguen las obras maestras de este dificil arte de la fritura acochinada. Los que ponen en la bodeguita Romero y Mejías logran esto y están exquisitos: jugosos y tiernos. Son entreveraos, de esos que llevan a capas, como bendito milhojas, carne y tocino. Vienen en piezas más bien pequeñas, para comer de un sólo bocado y presentados, en tapa de generoso tamaño, en una cazuelita de barro. El género se expone en el mostrador como diciendo «comemé» y al final la tentación de la carne funciona y termina pidiéndolos. Javier Blanco, el propietario junto a su esposa Gloria Mejías de este establecimiento con encanto, señala que «nos los traen todos los días de una carnicería de Sevilla. La clave es que sean del día y por eso están tan buenos». Van poco especiados y su color es morenito clarito. Es uno de los clásicos de este establecimiento junto a la ensaladilla, las papas aliñás o el queso que traen de la Sierra de Sevilla. Pero estos chicharrones tienen el plus de la estética del establecimiento. Lo suyo es comerse los chicharrones mientras vas repasando bocaito a bocaito las paredes de la bodeguita, llena de carteles y objetos relacionados con la Semana Santa de Sevilla. Hasta una máquina de tabaco está cubierta de cosas al igual que la puerta del cuarto de baño. No te pierdas «la cenefa» de la pared hecha con nazarenos como de juguete de las distintas cofradías. Ni el sitio donde te sientas, unas pequeñas mesas de madera con banquitos, tienen desperdicio. La tapa sale a 2,20 euros (precio a octubre de 2019) y la tienen todos los días.

Alvaro Löpez Serrano, el camarero de la bodeguita Romero y Mejías con la fuente de los chicharrones de Romero y Mejias. Foto: Cosasdecome.

El descubrimiento pertenece a la ciencia de:

Ciencias Cochinas. Este área de la ciencia tapatológica se encarga del estudio de todo lo referente al cerdo.