Una de las confiterías más populares y con más solera de Utrera. Fue fundada en 1898 por el utrerano Alfredo Reyes tras regresar de ‘hacer las Américas’ en Cuba. Los tres hermanos Juan, Carlos y José Manuel Martínez Durán, descendientes de Reyes, fueron los últimos de la familia en regentarla hasta hace pocos años. Tras su jubilación, ha pasado a manos de algunos de los trabajadores que llevaban toda la vida con ellos, dirigidos por Josefa Millán.

Entre sus dulces, uno de los más populares es el brazo gitano. Aunque también gozan de gran fama sus lenguas de nata, mostachones, bizcotelas, pasteles con nata, roscos de piñones y los «reyitos». En Navidad, muy demandados sus roscones de Reyes, especialmente los rellenos de nata.

La decoración del establecimiento mantienen la esencia de sus orígenes con un elegante reloj de principios del siglo XX y numerosas fotos históricas colgadas en sus paredes.