Bernardo Araujo puso el establecimiento en marcha en el año 1986, en la misma calle Silos, aunque en un local diferente al que ocupan ahora y en el que están desde 1993. En la actualidad es el hijo de Bernardo, Toni Araujo, formado en la Escuela de Hostelería de la Taberna del Alabardero el que gestiona el establecimiento.
El local es amplio y decorado con gusto. Tiene una pequeña terraza y luego una especie de recibidor donde se puede tapear y donde hay también una vitrina en la que exponen los productos del día. Luego un segundo comedor, donde también hay barra y un tercero, más amplio, utilizado como restaurante y que simula una cueva, aunque esto no le resta luminosidad.
En lo gastronómico se puede tapear o comer a base de platos. La línea argumental de la casa es la cocina con el producto local, fundamentalmente de Alcalá de Guadaíra. Cuidan mucho el pan y el aceite también es de la localidad. Luego algunos platos típicos alcalainos y cocina de producto, con un estilo clásico pero muy bien ejecutado. Las raciones son generosas. Tienen también arroces (caldosos con perdiz o rabo de toro, marinero, negro o uno al horno con verduras y presa de cerdo) y postres de elaboración propia. En la bodega también amplia presencia de vinos andaluces y, particularmente de Sevilla. Admiten reservas.
Panidaje: Bollos del Obrador San Francisco de Alcalá de Guadaíra. Los sirven zajaos, ligeramente calientes y con aciete.
Precio: Entre 20 y 30 euros.
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