Calle Alcalde Tierno Galván n. 26
La familia García Monge, la cuarta generación a cargo del establecimiento, desconoce la fecha exacta desde que se dedican a la hostelería, aunque calculan que fue en la segunda década del siglo XX cuando el tío de su abuelo, Santiago Domingo, puso en marcha el establecimiento que, en principio fue un despacho de vino aceite y otros alimentos. De ahí, precisamente, viene los de «El Carrillo» ya que utilizaban este utensilio para la venta. A Santiago le sustituyo en la gestión Manuel García Mejías, su sobrino, que hizo funcionar el local como una abacería. Pero la gran transformación del local vino en la segunda mitad del siglo XX, cuando el hijo de Manuel, del mismo nombre se hace cargo del local junto a su esposa, Francisca Monge, que fue la que introdujo las tapas en el local. Ellos se jubilaron en el año 2005, pasando la gestión a su hijo Manuel, que es que lleva actualmente el establecimiento.
El local, que ha tenido varias transformaciones en su historia tiene un comedor, donde también está la barra. El espacio es pequeño, apenas 3 mesas, más otras dos mesas altas junto a la barra. El espacio está alicatado a media pared y tiene estética clásica. A ello unieron en el año 2013 un amplio patio que les ha permitido subir el aforo a unas cien personas. En el patio hay un gran cartel donde están los abuelos Manuel y Antonia. En lo gastronómico, aunque tienen mesas y hacen reservas, se come, sobre todo a base de tapas de tamaño generoso, aunque también hay platos, especialmente de las sugerencias que trae Manuel y que son, fundamentalmente pescados y mariscos, sobre todo gambas que trae de Huelva y que presentan cocidas. El repertorio incluye aliños, como las famoso aliño de gambas, un amplio catálogo de frituras de pescado donde no faltan pijotas u ortiguillas y guisos de cuchara, que van cambiando cada día. El más famoso el cocido, que tienen en invierno, aunque también tienen riñones al Jerez, carne en tomate o paella los domingos. El último capítulo es el dedicado a las frituras. Tiene fama la bechamel de la casa que utilizan en las croquetas, las gambas con bechamel o el pollo. A ello unen en ocasiones también los huevos duros con bechamel o el chorizo. Amplio también repertorio de frituras de pescado que varía en función de las variedades que entren. La relación calidad precio es muy buena y admiten reservas.
Panidaje: Pan de bollo de la panadería Gonzalo de Dos Hermanas y picos y regañás de Obando de Utrera. Aquí más bares y restaurantes con buen pan en la provincia de Sevilla.
Precio: Entre 10 y 20 euros por persona.
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