Plato tradicional de la localidad sevillana de Pruna que se adaptaba al hogar y al momento del año en el que se elaborara. Así en la temporada de matanza del cerdo se acompañaba con chorizo y/o morcilla frita, y en la época del espárrago añadiénole espárrago y huevo. Pero la base siempre era la misma: una sopa de tomate seca.
(Para cuatro personas)
- Un pan de pueblo (500 gr)
- 1 kg de tomates maduros
- 6 dientes de ajo
- 1/4 kg de pimiento verde
- 1 vaso de aceite de oliva
En una sartén se pone a calentar el aceite, se le incorporan los dientes de ajo pelados y enteros. Cuando se empiecen a dorar se le incorpora el pimiento troceado. A continuación, los tomates pelados y triturados. Se deja hervir durante 15 minutos aproximadamente incorporándoles la sal al gusto.
Se desmenuza el pan a pellizcos (sobre todo la miga) y se le agrega a lo anterior. A fuego lento, se va hirviendo toda la masa hasta que se reduzca el caldo y empiece a coger un color doradito y se quede «seca».
Una vez apartada, se sirve con un chorreón de aceite de oliva.
Esta sopa es típica de los llamados años del hambre por lo que la básica no tenía mucha consistencia y era muy común acompañarla con rabanillas, aceitunas o pimientos en vinagre.