El establecimiento, un clásico de la zona, reabre con una cocina tradicional variada, homenajeando a las antiguas cervecerías de barrio
El Grupo Leña ha dado una nueva vida a Casa Molina, un bar clásico del Tiro de Línea que cerró sus puertas en 2023 tras más de sesenta años de actividad. El motivo fue la jubilación de su propietario, Ángel Molina, hijo del fundador, José María Molina. Hasta su cierre fue un representante de las cervecerías de barrio con algo de tapeo, concepto que el grupo Leña quiere rescatar, tras un breve periodo con otros propietarios que le dieron el nombre de La Faraona.
La nueva gerencia ha conservado los azulejos sevillanos. Foto cedida.
El local, de unos 250 metros cuadrados ha sido reformado aunque han mantenido sus característicos azulejos sevillanos y su larga barra con taperos. Tiene terraza, zona de barra para comer de pie, y un apartado con mesas bajas, y mesas con sofá. Entre los detalles que evocan la tradición está el papel parafinado con el que acompañan algunos de sus platos.
Entre las propuestas frías destacan tres variedades diferentes de aceitunas y gildas con diferentes combinaciones de ingredientes. Tienen un apartado de abacería, con tabla de quesos, jamón ibérico, chorizo ibérico… También sirven tapas frías, como cóctel de marisco o ensaladilla, montaditos, guisos tradicionales (carne en tomate, espinacas con garbanzos) y otros clásicos de los bares sevillanos. Fritos, elaboraciones a la brasa o plancha son otra de las opciones de su menú. A diario tienen sugerencias fuera de carta.
Aunque la cerveza en tanque de salmuera es parte de su identidad, tiene una carta de vinos con variedad de referencias de vermut, tintos, rosados, blancos, y generosos.
Dirección, horario, teléfono y más sobre Casa Molina
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