Ocho de sus establecimientos más emblemáticos se han unido para atraer al cliente sevillano desvinculándose de la imagen de territorio exclusivo para turistas.
Si Sevilla tiene un color especial, tal y como entonaban los del Río en su archiconocida sevillana, existe un barrio en su casco histórico en el que todas sus tonalidades se concentran con mayor nitidez y belleza. Donde la luz las hace brillar con fuerza entre calles estrechas, plazas de naranjos y coloridas macetas. El barrio de Santa Cruz, pintoresco y concurrido donde los haya (o había, hasta la actualidad) trata de sobrevivir en tiempos de coronavirus. Y con él su sector hostelero que acusa la ausencia de un turista, tanto nacional como extranjero, que atestaba sus barras y terrazas en cualquier época del año. Una situación a la que se suma las obras de la calle Mateos Gago, que limita el tránsito de personas por la zona.
Así las cosas, algunos bares y restaurantes de Santa Cruz han optado por echar el cierre de manera puntual. Pero otros están dispuestos a capear el temporal. Se trata de Casa Román, Las Teresas, La Hostelería El Laurel, El Pasaje, La Parihuela, Librero Tapas, San Marco y el Rincón de Murillo, ocho establecimientos que aúnan fuerzas para volver a conquistar al cliente local y revitalizar la hostelería en el barrio a través de la campaña ‘Saborea Santa Cruz’. “Queremos recordar al sevillano lo maravilloso que es disfrutar de nuestras plazas y calles, su aroma y su duende. Y por supuesto de nuestra gastronomía”, explica Antonio Castro, propietario de Casa Román. “Siempre hemos tenido una parte de nuestra clientela conformada por público local, pero ahora necesitamos de su apoyo más que nunca”, puntualiza el dueño de Las Teresas, Luis Sánchez.
Al mismo tiempo, los ocho bares integrantes de este colectivo desean desechar, según explica el propietario de la Hostería El Laurel, David Márquez, el tópico “que nos asocia con bares tan solo para extranjeros, donde se come caro y mal”. Los establecimientos que conforman ‘Saborea Santa Cruz’ presumen de una oferta gastronómica de alta calidad basada principalmente en una cocina tradicional andaluza abierta a todos los públicos y bolsillos. “Además, tenemos numerosas opciones desde bares históricos a algunos con un punto más actual y un italiano”, aclara Márquez.
Casa Román y las Teresas son los más antiguos del lugar. Fundados en 1868 y 1870, respectivamente, conservan intacto el encanto de las antiguas tabernas sevillanas. Sus cartas, dan cabida a la cocina más clásica de Sevilla con especial atención en ambos casos al jamón ibérico que cortan in situ y que sirven en tapas y platos. “Muchos de nuestros grandes platos lo tienen como protagonista como nuestros famosos huevos fritos con patatas y jamón, las croquetas, las alcachofas o las habitas”, repasa Antonio Castro.
Por su parte, Las Teresas entronca con su pasado como ultramarino, al igual que Casa Román, con su especial atención a los productos ibéricos y al queso puro de oveja. “Tenemos muy buena cocina. Nuestras espinacas, carillera o bacalao gustan mucho. Pero el jamón, las chacinas ibéricas y el queso son nuestro punto fuerte”, puntualiza Luis Sánchez, perteneciente a la tercera generación que regenta este establecimiento.
Otro de los establecimientos con solera del barrio que se ha unido sin dudarlo a la campaña ‘Saborea Santa Cruz’ es la Hostería El Laurel. Fundada como restaurante en los años 70, cuenta la leyenda que José de Zorrilla escribió en él algunos fragmentos de Don Juan Tenorio. A día de hoy, su propietario David Márquez explica que “para adaptarse a las circunstancias actuales” han transformado en formato tapa gran parte de su carta, aunque manteniendo intacta “nuestra garantía de calidad”. Pese a estos cambios, su elaboración estrella continúa siendo la tortilla de la casa que elaboran con patatas, huevos, cebolla, ajo y perejil. “Y que todo sevillano que se precie debería probar aunque sea una vez”.
En una antigua vivienda principios del siglo XX próxima a la casa natal de Murillo, se ubica desde 2012 el Rincón de Murillo. Se trata de un establecimiento actual en el que su dueño José María Bejarano rinde homenaje a las típicas tabernas sevillanas que tanto proliferan en el barrio de Santa Cruz. Su cocina mantiene esa misma línea clásica de comida casera destacando, según revela Bejarano, “nuestros arroces y carrillera”. De corte tradicional es también la Parihuela, el particular establecimiento que Jonathan Rodríguez abrió en 2008 con inspiración cofrade y elaboraciones de sabor casero y andaluz. “Nuestro montaíto de pringá es todo un referente” explica Rodríguez a la vez que destaca las referencias de su bodega. “Nos encantaría que hubiera un cambio de mentalidad en los sevillanos, que se dieran la oportunidad de probarnos. Seguro que les íbamos a sorprender”.
Y así sería. No solo por la ya mencionada calidad de su gastronomía, sino porque el barrio y Saborea Santa Cruz también cuenta con alternativas a la cocina andaluza con la que habitualmente se asocia a la zona. El caso más llamativo se encuentra en el restaurante San Marco que, en las instalaciones de unos antiguos baños árabes del siglo XII, sirve pizzas artesanas, pasta fresca, carnes y pescados de corte italiano. Aunque también destacan los que se reinventan con motivo de la pandemia, como El Librero Tapas en el que su creador Juan Pedro González combina la elaboración de espinacas con garbanzos o atún encebollado con un despacho tipo abacería de vinos y quesos nacionales e internacionales. “Hemos variado nuestra oferta convirtiéndonos también en quesería para abarcar una clientela de lo más amplia”, comenta González, desde su nuevo rincón de estética moderna a la par que vintage.
En lo que a diversificación se refiere dentro del grupo de los ocho del barrio Santa Cruz, es el bar El Pasaje el que se lleva la palma. Junto al establecimiento primigenio fundado en 1987, sus jóvenes propietarios han abierto en los últimos años El Pasaje Cocina, dedicado a actividades gastronómicas, talleres y cocina en directo, y El Pasaje Tapas, con elaboraciones de corte innovador con productos de mercado. Atendiendo a las nuevas tendencias, Fran Pazos, uno de sus socios, anuncia que esta misma semana han incorporado el servicio a domicilio de sus platos. «En el barrio tenemos mucho que ofrecer. Sevilla tan sólo tiene que redescubrirnos y será consciente de ello «, sentencia.
Los bares y restaurantes participantes en Saborea Santa Cruz:
- Casa Román. Plaza de los Venerables, 1. Abierto para almuerzos y cenas de lunes a domingo. Especializado en jamón ibérico. Más datos aquí.
- Hostería El Laurel. Plaza de los Venerables, 5. Abierto para almuerzos y cenas de miércoles a lunes. Horario ininterrumpido. Especialidad: Tortilla de la casa. Más datos aquí.
- Las Teresas. Calle Santa Teresa, 2. Almuerzos y cenas de lunes a domingo. Especialidad: jamón y chacinas ibéricas, queso puro de oveja. Más datos aquí.
- Bar El Pasaje. Pasaje de Vila, 6. Almuerzos y cenas de viernes a domingo. Especialidad: Torrija de foie. Más datos aquí
- La Parihuela. Pasaje de Vila, 12. Local derecho. Almuerzos y cenas de lunes a domingo. Especializado en montaditos de pringá.
- San Marco. C/ Mesón del Moro, 6. Almuerzos y cenas de viernes a domingo. Jueves solo cenas. Especializado en pastas y pizzas italianas de elaboración propia.
- El Rincón de Murillo. C/ López de Rueda, 18. Almuerzos y cenas de lunes a domingo. Especialidad: carrillera y arroces.
- El Librero Tapas. Pasaje de Andreu, 4 local. Almuerzos y cenas de lunes a sabado. Especializado en aliño de atún encebollado y quesos nacionales e internacionales.