Ramón López de Tejada señala que La Excusa Perfecta, el establecimiento que abrirá en el antiguo Enrique Becerra, será un sitio donde se rinda culto al guisoteo. El hostelero agradece a Jesús Becerra «que haya confiado en mi» para regentar «este trozo de la historia de Sevilla»

 

«Dios me puso en su camino a Jesús» señala Ramón López de Tejada, 56 años. Apura un oloroso, que es la bebida perfecta para las doce de la mañana. Está en una mesa alta, de las de codo, en un bar cercano al que será su nuevo establecimiento en Sevilla, La Excusa Perfecta.

Cuando habla de Jesús, habla de Jesús Becerra, el propietario del restaurante Becerrita y también dueño del edificio que alojaba al restaurante Enrique Becerra, que gestionaba su hermano, Enrique, uno de los taberneros que han hecho historia en la ciudad y uno de los máximos «reivindicantes» de la cocina sevillana.

La historia comienza a primeros de septiembre. «Estaba en casa – señala Ramón López de Tejada- y recibí un mensaje en el móvil. Era Jesús Becerra y me preguntaba si tenía algo previsto después del cierre de la antigua abacería. Lo llame. Nos vimos. Nos hemos visto unas pocas de veces durante estos 3 meses y hemos llegado a un acuerdo de alquiler».

Jesús Becerra, de Becerrita, con una de sus ensaladillas. Al fondo un cuadro de La Giralda que preside uno de los comedores del restaurante. Foto: Cosasdecome

«Estoy ilusionado, expectante y con vértigo» señala este hombre que conoce como pocos los rincones y los productos de la provincia de Sevilla. Mientras paseamos por la calle no para de recibir muestras de ánimo para su nuevo proyecto. Consiguió poner en lo más alto una taberna en el barrio de San Lorenzo, la antigua abacería, un sitio, por cierto, que volverá a abrir en enero, aunque ya no con la gestión de López de Tejada.

Lo primero que quiere decir Ramón es que La Excusa Perfecta no será una continuación de la antigua abacería. «Será algo diferente. Tendremos cocina tradicional y estaremos muy orientados a los guisos, pero tendrá personalidad propia: Habrá guisos que estuvieron en la abacería y de hecho el equipo de cocina será el mismo».

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De hecho la decoración del establecimiento será diseñada por el propio hostelero. Todo girará en torno al color verde, que es el color que tendrá el edificio, señala. Habrá dos espacios diferenciados. La planta baja estará dedicada al tapeo, mientras que la primera será más de restaurante y habrá posibilidades de contar en esta zona con reservados. «De todos modos, no es un concepto cerrado, señala. Las cartas de ambas estancias irán en la misma línea».

El logotipo de La Excusa Perfecta.

«No te sé definir exactamente como será la decoración. No será una taberna, ni intentaremos imitar algo antiguo. Será algo que suene a tradición pero a la vez siendo conscientes de que estamos en el siglo XXI».

Los guisos tendrán una importancia fundamental «porque creo que es algo que la gente busca. Es algo que hacemos bien y es un hueco a llenar en el centro de Sevilla. Será nuestra columna fundamental. Habrá sopa tomate, potajes y probablemente algún guiño a la cocina de Enrique Becerra al que queremos recordar de alguna manera en esta casa, que fue la suya durante mucho tiempo».

Becerra y López de Tejada se conocen e incluso realizaron alguna colaboración en un programa de radio hace unos años. Ramón elogia la labor realizada por Becerra «que mostraba una versión de mucha calidad de la cocina andaluza en su establecimiento». Por su parte Enrique Becerra se muestra muy contento con el hecho de que sea López de Tejada el que se haga con su local después de su jubilación. «Me gusta mucho como trabaja y creo que de alguna manera el espíritu de mi casa seguirá vivo con él».

El hostelero y escritor Enrique Becerra en una foto tomada cuando aún gestionaba su establecimiento. Foto: Cosasdecome

Becerra abrió el establecimiento con tan sólo 21 años el 3 de octubre de 1979 y cerró en 2020, tras más de 40 años al frente, porque ya su salud no le permitía seguir. Durante este tiempo este tabernero, como le gusta que le llamen, hizo famosos platos como la cola de toro, la carrillada, los riñones, el menudo o unas estupendan papas aliñás. Ahora se dedica a escribir, su otra gran pasión y anuncia nuevo libro proximamente.

En el libro de firmas del restaurante Enrique Becerra, es un verdadero tesoro que muestra la cantidad de personajes que han pasado por su restaurante: 14 premios Nobel, 7 presidentes de Gobierno, todos los premios Príncipe de Asturias y celebridades de la talla de Harrison Ford, Joan Manuel Serrat o Valéry Giscard d’Estaing, el ex presidente de la República Francesa que estuvo en la casa y probó las albóndigas de cordero, aromatizadas con un poquito de hierbabuena.

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El que también está muy ilusionado con la operación es Jesús Becerra, el propietario de Becerrita, otro de los sitios grandes de Sevilla y también dueño del inmueble donde estaba Enrique Becerra. Las obras de rehabilitación del edificio, situado en pleno centro y en una zona de gran interés «tapatológico» han comenzado ya. Las dos primeras plantas se dedicarán al nuevo bar restaurante y las restantes alojarán apartamentos turísticos.

Jesús Becerra señala que  «Una de nuestras prioridades era que el establecimiento fuera regentado por alguién de aquí, que conociera la hostelería. Queríamos que fuera un establecimiento de cocina tradicional, en la línea de lo que había y Ramón lo reúne todo. Es un apasionado de la cocina andaluza tradicional, ha demostrado su buen hacer en la antigua abacería y creemos que es la persona idónea para regentar el sitio».

La idea de Ramón López de Tejada es que el establecimiento esté funcionando en el último trimestre de 2024 «aunque con las obras hay que ser prudentes». Una vez que las obras del edificio estén terminadas, habrá que llevar a cabo la decoración del local e instalar la maquinaría de las cocinas y el mobiliario del establecimiento.

Destaca que hemos encontrado «La Excusa Perfecta, la de volver a hacer lo que me gusta y también para la familia Becerra de seguir la línea del establecimiento…por eso el nombre del sitio».

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