El bar de "los morunos" y el pulpo marisquero

La freiduría Anduriña de Castilleja de la Cuesta ofrece una interesante carta de mariscos y pescados. Entre las especialidades, unas colas de gambones (morunos) que traen de Huelva y que hacen fritos o pulpos marisqueros que ofician asados, a la gallega o en ensaladilla

A José Mendoza, el abuelo de Ángel, el gerente del bar freiduría, le decían el «Anduriña», el equivalente en gallego a golondrina. El apodo le venía por su capacidad para no estarse quieto nunca. Su pasión por el mar la heredó su hijo y ahora su nieto, Ángel Mendoza Pomares, que lleva toda su vida dedicada a los pescados y los mariscos, primero ayudando a su familia, desde los 13 años, cuando manejaba los trasmallos quitando el pescado de las redes, luego como pescadero con local propio en Castilleja de la Cuesta y ahora en su bar freiduría que se ha convertido en toda una referencia en El Aljarafe a la hora de hablar de buenas cositas del mar a precios que «no arañan la cartera».

Angel con el pescado y el marisco que acaba de adquirir. Foto: Cedida por el establecimiento

Angel, 47 años y nacido en Punta Umbría, acude cada jueves a primera hora a Mercasevilla para seleccionar la materia prima que pondrán durante el fin de semana en su establecimiento. A ello une lo que le llega directamente de las lonjas de Isla Cristina y Punta Umbría donde tiene compradores que le seleccionan la materia prima.

Mendoza habla con pasión de los productos. Siente predilección por todo lo que viene de la costa onubense. «Aquí trabajamos con los morunos, que son unos gambones que se pescan por allí y que están muy buenos. Traemos también acedías de trasmallo que están más jugosas y siempre que lo hay traemos también el pulpo marisquero, que se coge con cangilones y que tiene un sabor a marisco, porque se alimenta de eso».

En estos días una de las estrellas del establecimiento son las sardinas. «Solo las traemos en verano, cuando están gordas y jugosas». Las sirven sin quitarle las entrañas «porque si se abren pierden mucha jugosidad» señala este profundo conocedor de todo lo que sale de la agüita salá.

Las sardinas las presentan de una forma curiosa. Van asadas y acompañadas de una rodaja de pan tostado cada una, con un poquito de aceite de oliva por encima. «Las comenzamos a servir así cuando regentaba el bar de la peña sevillista. Algunos clientes nos las pedían de esta forma y al final terminó haciendose costumbre».

Las sardinas, solo en temporada. Foto: Cosasdecome

El sitio es amplio, sobre todo la terraza, parcialmente cubierta y presidida por un expositor donde están los pescados y mariscos del día y una buena batería de aliños donde no falta el pulpo con cebolleta, el atún al ajo, la ensaladilla de pulpo o de gambas o los huevos rellenos.

Dentro un salón con mesas y una pequeña barra. El bar funciona también como freiduría y despachan los pescados para llevar en cartuchos de papel de estraza.

La carta es amplia. Tienen hasta 15 frituras diferentes que van desde los chocos a los taquitos de bacalao o de merluza. Hay puntillitas «de nuestra costa», salmonetes, pijotas de Isla Cristina, salmonetes o pavías de bacalao elaboradas por ellos mismos Las medias raciones salen todas a 7,50 euros, excepto las puntillitas que solo salen por raciones a 13.

La terraza. Foto: Cosasdecome

Pero en este campo la estrella de la casa son «las colas de moruno» fritas. Son gambones que vienen desde Huelva. Les quitan la cabeza y la cáscara y solo le dejan la cola. Los pasan por harina y se frien. El marisco está jugoso y no suelta ni gota de aceite…fritura de sobresaliente.

Los morunos también los sirven en brochetas con chipirones. Otro de los atractivos de este sitio es su precio. Muchos de los platos que tienen los ofrecen por tapas que están entre los 3 y los cuatro euros. Hay un amplio surtido de aliños, montaditos, entre los que no faltan el serranito, el mantecaito o el de gambas con alioli o algo de guisoteo como el menudo, la carrillá, el bacalao a la roteña o paella los domingos. En temporada caracoles y cabrillas.

También se pueden tomar por tapas huevas de merluza o de choco, a 3,50 cada una, y hay pez espada, chipirones, lubina o pulpo también pasados por la plancha.

Angel Mendoza, con un par de fuentes de sus productos. Foto: Cosasdecome

También sirven por tapas (3,5) las gambas al ajillo. Si las hay de buen tamaño las gambas de Huelva las sirven a la plancha, pero también las tienen cocidas. El tema marisquero se complementa con langostinos tigre, patas rusas o cañaillas, además de lo que traigan fuera de carta «que depende de lo que veamos en el mercado» señala Angel.

No faltan tampoco las chirlas, las coquinas o unas almejas hechas al ajillo y en un magnífico punto de cochura, que sorprende en un sitio con tanto movimiento como este, donde cuesta trabajo encontrar mesa si no se reserva con anterioridad, sobre todo los fines de semana.