Naturalmente, un restaurante situado en el barrio de Santa Cruz, ofrece unas propuestas para desayunar muy originales, con productos de cercanía muy bien presentados
Desdeluego si uno quiere empezar un día con alegría, en Naturalmente, un restaurante situado en la calle Rodrigo Caro, en pleno barrio de Santa Cruz, tiene el sitio adecuado. Un camarero, perfectamente uniformado así como en plan sitio de comida sana, se acerca con un plato de cerámica en el que destaca una tostada con muchas verduras por lo alto. Es la tostada de verduras de temporada, una rebanada de pan del horno Infermanto de Bormujos, ligeramente tostada y que lleva encima unas vistosas tiras de zanahoria, habichuelas verdes, col o pepino. Para darle más sabor a la cosa un «enfoscado» a base de crema de aguacate (la manteca del siglo XXI y el producto fetiche de la nueva hornada de desayunos) y unos pegotones de una especie de paté de aceitunas negras.
La cosa se come con cuchillo y tenedor porque la boca no da para engullir tanto volumen con los certeros bocaos con los que nos comemos la media de jamón. Pero la tostada de verduras no es la única propuesta colorista y original que hay en el local.
Otro de los éxitos de la casa es la tostada de queso que lleva el típico mozarella italiano, pero el de búfala, que es más auténtico, acompañado con aguacates, unos tomates asados y también un pesto elaborado con ellos mismos. El paisaje se complementa con unas hojas de rúcula.
En total tienen hasta 8 tostadas diferentes, todas elaboradas con pan del horno artesanal de Bormujos y en las que también tienen varias posibilidades con huevos revueltos o salmón y una elaborada con frutas y frutos rojos y luego aromatizada con canela. También se puede pedir alguna variante con pan tipo brioche o «baggels», un pan muy de moda en las tendencias de nuevos desayunos y que es redondo y con un boquete en medio, como los donuts.
Desayunar en Naturalmente no sale por los dos euros de una tostada con mantequillla. Las tostadas salen por entre 6,9 y 13 euros pero la filosofía del local no es realizar un desayuno ligero, sino que se acompañe la tostada con un tazón de frutas o algo más y constituya una comida. De alguna manera te invitan a que te construyas tu propio «brunch», la última tendencia en desayunos, importada de países anglosajones y que consiste en realizar un desayuno muy potente, más bien casi a mediodía y que sustituye al almuerzo al que estamos acostumbrados aquí.
Naturalmente abrió el pasado mes de noviembre. El sitio es de esos cuidados hasta el último detalle. Tiene cierto toque romanticón. La terraza es de las que se meten por los ojos. Está en una finca antigua rehabilitada. Las mesas y las sillas son de madera, como las que ponen en las ferias, pero pintadas de celeste oscuro. Los ventanales están adornados con persianas de esparto como las que se ponen en las bodegas para mantener el fresquito. En la parte alta, en una pequeña cornisa, pequeñas luces como recordando una verbena de pueblo. En el centro de la escena un gran cartel en inglés anunciando la oferta del establecimiento que apuesta por el todo hecho por ellos mismos y con productos lo más naturales posibles.
El interior del local no se queda atrás en estética. Hay como tres pequeños salones que se suceden en un mapa en u. Las paredes revestidas con papeles pintados se alternan con ladrillo visto. En los techos cuelgan capachas y objetos de esparto. Hay muebles antiguos restaurados y junto a la barra, que solo funciona para el servicio de camareros, una fuente de donde extraen el agua filtrada que sirven en botellas de cristal sustituyendo a las botellas de agua mineral.
La iniciativa es de varios hosteleros. Por un lado está el cocinero de origen italiano Stefano Monateri, que se ocupa de la cocina junto a la venezolana Kiara Velasco y por otro Francesco Viola, otro emprendedor italiano que actúa como jefe de sala. Los tres tienen experiencia en hostelería. De hecho Kiara Velasco regenta también otro local, Ringo Banana, situado en la calle Alhóndiga y que también está especializado en desayunos de nuevo cuño. Pero cuentan también con el respaldo de un grupo hostelero de los potentes de Sevilla, GMI, que tiene varios restaurantes centrados en la cocina italiana, el último un original local, Farina 23, que está dedicado a las pizzas mostrando los diferentes tipos que hay en italia.
Pero las tostadas originales no es la única oferta de desayunos que tiene Naturalmente. Ofrecen también tazones de frutas, con yogur y cereales, algunos importados directamente desde Italia. La estética vuelve a estar muy cuidada. Emplean frutas naturales, yogures de cabra o del tipo griego. La fruta y la verdura viene de la finca Bioalverde. Probamos un tazón de yogur de cabra, que traen desde la famosa quesería El Cabrero de Bolonia (Cádiz) que mezclan con frutos rojos y que incluye luego tropezones abundantes de fruta fresca, avellanas tostadas y una crema de avellanas y chocolate.
Incluso ofertan un tazón realizado con leche de coco, fruta fresca y una mermelada de arándanos. Tienen también bollería con algunas piezas elaboradas por ellos mismos y se puede también desayunar un trozo de quiché, una tarta salada de origen francés y que suele llevar verdura y queso sobre una base con un toque hojaldrado.
En la oferta bebible también reina la originalidad. El café viene del tostadero Inefable de Dos Hermanas y hay también un amplio catálogo de infusiones y de zumos en los que mezclan diversos tipos de frutas.
El establecimiento, que cuenta con una placa de la certificadora Caae que lo reconoce como hostelería ecológica, no se limita a los desayunos. Continúan abiertos al mediodía con una oferta que agrupan bajo el paraguas de «lunchs», que traducido resulta almuerzo, en esta moda que existe ahora por llamarlo todo en inglés, como si todo lo que se pusiera en español fuera una catetada.
Bajo este nombre tienen una oferta basada en un almuerzo ligero a base de ensaladas y platos internacionales en esta misma línea. Así ofrecen desde una ensalada de quinoa, lentejas y verduras de temporada asadas hasta otra de espelta, queso tipo burrata italiano, tomates semi secos, alcachofas, aceitunas de la variedad taggiasca, rúcula y semillas de calabaza.
Tienen también una sopa del día, una pechuga de pollo campero al estilo asiático macerada con soja, cajún y miso, verduras encurtidas y puré de patatas con wasabi o chuletilla de cerdo ibérico al horno con copos de maíz, pak choi en salsa de soja y sésamo y compota de manzana asada.
Ahora estudian también abrir algunos días para cenas en esta misma línea. Destacan que por ahora su público es más bien extranjero, pero la idea es también llegar al público local, para los que busquen una experiencia diferente.
El local, por la calidad de su oferta gastronómica y su cuidado de todos los detalles, se aparta del típico local para turistas y entra dentro de esas opciones que te gusta tomar de vez en cuando para variar de los desayunos de siempre.
Aquí puedes ver la carta completa de Naturalmente.
Horarios localización, teléfono y más datos de Naturalmente, aquí.
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