Los cuatro establecimientos de Casa Ruiz de la capital hispalense sirven desde hace cuarenta años estos singulares panes cuadrados durante los desayunos.
Si algo caracteriza a los desayunos de los cuatros establecimientos de Casa Ruiz, repartidos entre las zonas de Nervión, Huerta de la Salud, casco histórico y Sevilla Este, es la amplia variedad de panes a escoger para sus tostadas. Desde que su propietario Juan Ruiz Lora fundara el primero de ellos en 1982, estos restaurantes han contado con los populares bollos y prietos de La Algaba. Aunque también con una pieza de pan no tan conocida en la ciudad de Sevilla: el mollete cuadrado oriundo de Marchena.
De hecho, todo hace apuntar que es Casa Ruiz el único sitio donde encontrarlo en la capital. Se trata de uno mollete cuya forma se atribuye a su origen árabe y que se distingue, además de por su aspecto, por la levedad de una masa que se encuentra muy alveolada, recordando un poco a la chapata italiana. En los establecimientos de Juan Ruiz Lora los molletes de Marchena se sirven tanto en formato pequeño, a 2,40 euros con café, como grande, que asciende a 3,15. También cuentan con una versión integral. Todos ellos pueden acompañarse con la manteca o chacina ibérica de producción propia de Casa Ruiz que el cliente elija, aunque lo más habitual es pedir «el de la casa» con aceite y jamón. Casa semana, el establecimiento de la calle Pablo Cepeda de Nervión vende al público unos sesenta molletes marcheneros de tamaño normal y otros sesenta pequeños.
Más sobre los molletes marcheneros, aquí.
Aquí la gran gruía del mollete de la provincia de Sevilla.