Aparte de sus conocidos mostachones de Utrera, el pan ha sido el oficio originario familiar de los Vázquez desde 1880, que desde algo más de un año venden diferentes tipos elaborados con masa madre
La pastelería Diego Vázquez de Utrera, famosa por sus mostachones, ha retornado a sus orígenes, panaderos. Diego Vázquez es panadero de quinta generación. La historia comienza con su bisabuelo, que fue hornero panadero de las monjas clarisas en Utrera, y él continúa con el legado familiar.
Durante mucho tiempo, como parte de una cooperativa de panaderos, no quisieron hacer competencia al resto de negocios de Utrera y continuaron con su especialidad, los mostachones. Alrededor de 2021, tras el cierre de la panadería de su padre y con la pandemia, comenzó a hacer pruebas. Estas han derivado en una línea de panadería que elaboran ellos mismos. Son panes de masa madre láctica, que comienza con frutas para que el pan tenga el toque ácido que lo debe caracterizar. Las fermentaciones son largas, de unas 18 a 24 horas, y las harinas que utilizan son las molidas a la piedra.
Preparan panes de diferente tipo hogazas, pan de leche, molletes, brioches… También con harinas de diferentes cereales, como espelta, centeno y trigo que también combinan en alguna receta. Utilizan ingredientes como la cúrcuma, el jengibre, las especias, ciruelas pasas, nueces para sus panes más creativos.
El obrador mantiene su pastelería, con sus mostachones, y dulces tradicionales a los que en los últimos tiempos han incorporado la mezcla de las tradiciones judía y cristiana árabe en sus expositores, como por ejemplo el baklava.
Todos los datos de la Confitería Diego Vázquez, aquí.
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