La panadería La Esencia de Mairena del Aljarafe elabora una veintena de creaciones artesanas de masa madre y una serie de especialidades tan originales como el pan de salmorejo o el de espinacas.
Javier González escucha con frecuencia a sus clientes manifestar que sus creaciones saben «a pan, pan». También que les evocan a momentos de su infancia o incluso que no han encontrado piezas tan saludables y compatibles con sus intolerancias alimentarias. Es entonces cuando la mirada de este joven emprendedor sevillano se ilumina de satisfacción. «Miro entonces hacia atrás y todo cobra sentido», declara González, ingeniero de profesión que abandonó su carrera profesional hace unos cinco años para volcarse en lo que, casi por casualidad, descubrió como su vocación: las masas fermentadas y la elaboración de pan. «Mi familia es de origen panadero, me pasaron algunas recetas, estuve experimentando y me fascinó hasta el punto de irme a Barcelona a formarme».
De esa formación y del entusiasmo de Javier nació en 2017 en Mairena del Aljarafe la panadería La Esencia, un nombre que condensa toda una declaración de intenciones. «La de un pan que vuelve al origen, a lo artesanal, a los ingredientes cuidados», manifiesta su propietario quien, en un principio, pensaba dedicarse tan sólo a elaborar piezas para hostelería. «Mi idea inicial era hacer panes innovadores y saludables para bares y restaurantes, pero la demanda del cliente de a pie empezó a crecer. Así que decidí mantener las dos opciones».
De hecho, la segunda de ellas ha alcanzado una dimensión inesperada para Javier González. Las largas colas que se forman a menudo en su establecimiento han hecho que el joven emprendedor diversifique constantemente su oferta para atender a un público ávido de sus creaciones. Y es que La Esencia cuenta con más de una veintena de panes diferentes, sin sumar un grupo de especialidades que cambian cada 15 días. Entre ellas se encuentran elaboraciones tan singulares como un pan de espinacas, de pimientos asados u otro de salmorejo, de reciente lanzamiento. «Preparamos el salmorejo y lo incorporamos directamente a la masa. Ha gustado tanto que lo hemos tenido que convertir en un fijo», desvela el propietario de La Esencia.
La originalidad y capacidad imaginativa de este obrador mairenero parece no conocer límites. También cuentan con un apartado de pastelería donde, además de tartas, palmeras o croasant con matequilla francesa hacen su propia revisión de los clásicos como el ‘browniesú’, una fusión entre brownie y tiramisú. «Todas las semanas sacamos productos nuevos, la verdad es que no paramos de crear»
Una inquietud creativa que Javier González también focaliza en el que es el nuevo proyecto de La Esencia: la puesta en marcha de un punto de venta directo en el centro de Mairena del Aljarafe. Allí, se podrán consumir in situ productos de panadería y pastelería del obrador en horario de desayunos y meriendas, acompañados de café artesanal. «Aún estamos ultimando detalles. Nos gustaría que empezar a funcionar en octubre», revela González.
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